Gerardo Leotta es médico veterinario, investigador de Conicet, profesor en la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad de Buenos Aires (UBA), está a cargo de la Gerencia Técnica de Consorcio ABC, pero por sobre todo una de las personas que más sabe de la plataforma VISEC y la incidencia que la misma tiene en el sector cárnico.
En el marco de las exigencias de la Unión Europea respecto a la deforestación, que tiene mucha incidencia en la región, con Valor Agregado (Carve-Uruguay) y Agro del Sur, abordamos al Dr. Leotta para profundizar de qué se trata VISEC y qué consecuencias tiene para el sector agropecuario.
“Es una plataforma compleja representada por muchos actores, que significa Visión Sectorial del Gran Chaco, con foco, pensando en la República Argentina, y actualmente está extendido a todo el país. Empieza con esta plataforma, con este desarrollo, la cadena sojera, y la cadena de la carne se suma en diciembre del año pasado”, comenzó definiendo a VISEC. Y sumó: “Está conformado por una Comisión Directiva, donde están las cuatro entidades del agro (SRA, FAA, Coninagro y CRA- Mesa de Enlace), y las tres cámaras de frigoríficos exportadores y APEA, que es una asociación de productores exportadores ,y adhieren sectores de las carnes, transportistas, feedloteros, Cámaras de feedlot, consignatarios, toda la cadena desde el productor ganadero hasta el producto final”.
El punto central es el Reglamento 1115 de la Unión Europea, que tiene el requisito que todos los productos que ingresen al bloque deben provenir de campos libre de deforestación, a partir del 1 de enero de 2021.
Sobre el particular, Leotta explicó que “lo que tiene que tener certificación es el producto, en este caso estamos hablando, por ejemplo de un contenedor de carne cuota Hilton, lo que va con certificación es ese contenedor, lo que sí es importante es que todos los cortes que conforman ese contenedor tienen que provenir de animales que en toda su vida no hayan pasado por un campo que sufra deforestación demostrable desde el 31 de diciembre de 2020 en adelante”.
En relación a la trazabilidad, que Argentina comenzará a exigir en forma individual y electrónica, aclaró que “los animales están identificados de forma individual y hay un sistema de trazabilidad por tropa, esto quiere decir que cada vez que hay un movimiento de hacienda está acompañado por un documento y la información de ese documento ingresa al sistema oficial del Senasa donde queda registrado. Entonces es posible trazar y verificar por qué campo pasó ese animal que llega al frigorífico. Es más, la idea es poder tener esta información antes que se realice la compra de hacienda y que no lleguen animales no aptos por deforestación al frigorífico”. Y agregó: “También desarrollamos un procedimiento para la segregación de animales si se identifica que llega al frigorífico y pasó por algún campo deforestado”.
Sobre la trazabilidad electrónica, que hoy Uruguay aplica y Argentina está próximo a hacerlo, manifestó que “Es una enorme ventaja la de Uruguay, que tiene todo un sistema perfectamente trazado de forma individual que permite identificar si cada uno de los animales que van a conformar un contenedor de carne pasaron por algún establecimiento que haya sido deforestado. Por supuesto que es mucho más sencillo”.
¿Quién hace la certificación? “La certificación no la hace VISEC, sino que la hacen terceras partes independientes. Puede ser cualquier certificadora que cumpla con los requisitos que establece la Unión Europea y también las empresas que hacen el análisis de imágenes tienen que cumplir con ciertos requisitos establecidos en cuanto a la calidad de imagen, pixelado y plataformas de herramientas informáticas que usan para la obtención de las imágenes y el análisis. O sea, VISEC lo que hace es dar garantías de que las empresas de análisis de imágenes y las certificadoras como tercera parte independiente cumplen con los requisitos que pide la Unión Europea”, responde Leotta.
Costo.- En cuanto a los costos que esta plataforma tendrá y sobre quién recae, el especialista sostuvo que no recae sobre el productor ganadero, sino sobre el exportador, “lo que si el productor ganadero va a tener que cumplir con ciertos requisitos, que es aportar información sobre todo de dónde está ubicado su establecimiento para poder hacer el análisis de imágenes y poder dar garantías que ahí no hubo deforestación. El costo que tenemos hasta este momento es el análisis de imágenes y el desarrollo y mantenimiento de la plataforma informática, que es donde se para la cadena de ganados y carnes para poder generar la certificación. Y no sabemos cuánto va a impactar en cuanto al precio por tonelada, lo que sí va a haber un costo de certificación asociado por contenedor o por embarque, ya sea marítimo, aéreo, pero no sabemos todavía cuánto es. Se espera que sea el menor costo posible”.
Sobre la realidad de los diferentes países de la región, Leotta describió que: “En el Reglamento hay un artículo, el 29, que habla de la clasificación de los países con base en riesgo de deforestación y se plantean tres clasificaciones de riesgo alto, de riesgo estándar y de riesgo bajo. Y según este riesgo, que es un riesgo a nivel país, no de establecimiento, no de frigorífico, va a estar la presión de controles de embarques. Entonces, un país clasificado de bajo riesgo va a tener una presión de control baja, lo cual no quita que todos los embarques tengan que tener una demostración de que no están asociados con deforestación. Una cosa es el riesgo con el que clasifiquen al país y los controles que reciban los productos que se exporten de ese país, y otra cosa es la información que le tiene que dar cada exportador al importador para que cumpla con las diligencias”
Finalmente, respecto al precio que se puede pagar por parte de la Unión Europea, si se cumple con la normativa, remarcó que “este cumplimiento lo que garantiza es el acceso al mercado. Es un esfuerzo grande, no es imposible. De hecho, ya hemos enviado y se hizo una prueba piloto en el marco de este sistema, donde se mostró que los campos, ninguno tenía deforestación, que el sistema funciona. Esperamos que haya un mejor precio. Entiendo que toda esta presión y esta nueva reglamentación está asociada por requerimientos del propio consumidor”. “Si el consumidor tiene, además de todos los requisitos sanitarios existentes o las definiciones de las dietas, este es un requerimiento más. Se espera que haya algún beneficio económico que pueda compensar todo este esfuerzo y este nuevo requerimiento”, completó.
